martes, marzo 31, 2009

La Abrochadora Roja

Puede que la siguiente exposición esté embebida de subjetividad, pero no por ello debemos considerarlo como un relato ficticio.

Sucedió que, estando en el trabajo, tuve la formidable idea de abrochar unos comprobantes.

Revolví cajones, estantes, placares y... ¡La maldita engrampadora no apareció! Ofuscado y agitado me senté para reconsiderar la situación. Tomé fuerzas, respiré hondo y volví esta vez para realizar una requisa exhaustiva y minuciosa por los mismos lugares que había examinado y agregué además sitios absurdos tales como el cesto de la basura, adentro del paquete de la yerba o detrás del inodoro del baño.

Mis compañeros observaron no sólo que la situación iba tornándose incontrolable sino que, por ese momento, ya me había transformado y me reemplazaba una ser completamente descontrolado, alienado, que bociferaba palabras ininteligibles y que hacía ademanes con las manos y creo (no estoy muy seguro) que hasta babeaba.

Obviamente temieron por sus vidas y tomaron la decisión (muy acertada por cierto) de colaborar en la búsqueda.

Ni bien uno de ellos abrió el primer cajón que se le ocurrió, dijo: "Acá está..."

¡No lo podía creer! ¡Lo chequeé varias veces, cómo no voy a ver una puta abrochadora roja!

La tomé entre mis manos y... con toda la rabia del mundo la arrojé contra el piso (la maté). Me dio la sensación (no sé si influyó el estado en el que me encontraba) que previo a tocar el piso, millones de ganchitos 10/50 se eyectaron y se salvaron de semejante tragedia activando unos minúsculos paracaídas. No me alteró en lo más mínimo. Sólo les comenté a mis compadres con voz firme y con un dedo índice levantado:

¡Acá hay un complot de los objetos inanimados!

Los muy sabandijas: ¡Se esconden! ¡Se esconden!

miércoles, marzo 25, 2009

Fiambre de exportación

Vino a casa Obama.

Comimos una polenta "re-pulenta".

Y de postre, lo sorprendí con un gelatinón.

Lo noté cabizbajo.

Me dijo que estaba muy preocupado por la situación de su país y por la del mundo (obviamente en inglés) y que nos envidiaba.

Sí, Obama me dijo: "...no puedo creer que combatan exitosamente la crisis mundial con -planes canje- de calefones, cocinas, termotanques y bicicletas..."

¿No me la prestan a Cristina unos días?

Me enfureció, se desubicó el morocho, y lo eché a patadones.

Mientras se sobaba el culo, le lancé una frase matadora (como para que le quede bien claro).

"Te la llevarás... pero sobre mi cadáver"

viernes, marzo 20, 2009

Juanita, la domesticada

La publicidad difundía la siguiente leyenda:

"370.000 Empleadas domésticas en blanco"

"Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, A.F.I.P"

"Entre todos lo estamos haciendo posible"

Bien, si Juanita trabaja en casa: ¡Le tengo que realizar los aportes para que esté en blanco!

Para ello debo imprimir el formulario 102 de la A.F.I.P, el cual establece los parámetros a remunerar dependiendo de las horas semanales que Juanita ha trabajado.

En este caso, corresponde el ítem: "Entre 6 y 12 horas semanales = $20"

¡Listo! ¡Juanita está en blanco y tremendamente emocionada!

(¡Para qué arruinarle la fiesta diciéndole que aportando $20 mensuales, su jubilación no le va a alcanzar ni para comprar un 38 y "viajar al otro lado"!).

"Entre todos los estamos haciendo cogible"

viernes, marzo 13, 2009

Tutucas

Creo, sinceramente, que la Iglesia "pone" plata y/o "tutuca" para que el infecto de H.I.V. no se encuentre con la cura.
¿Por qué?
Porque... no se debe fornicar con preservativo, el único método "permitido" por "La Institución"es el de -culear- cuidándose con el sistema "archiseguro" de: "Los días".
Además, es conveniente, tener esclavos cívicos (pobres con muuuuchosss hijos).
Es cuestión de esperar, de ver cómo cae... comprarse un popcorn y ubicarse en un lugar privilegiado...adquirir unos lentes 3D (mitad azul, mitad rojo) y cerrar el puño al ver "El Episcopado" desmoronarse, tal como se desmoronaron las Torres Gemelas...

miércoles, marzo 04, 2009

Cuatro elementos

(Este post se lo debo a Omar Z.).
No es posible, comenzó diciendo Omar, que tengamos que pagar para obtener los 4 elementos esenciales de la vida.
El Agua, nos la embotellan y pagamos por un "barro" que ni siquiera conserva sus propiedades naturales.
El Fuego, en cierta manera, viene facturado.
No somos dueños de la Tierra que pisamos.
Y el aire... falta solamente que dentro de poco tengamos que transportar un par de tubos en la espalda y dirigirnos a una especie de estación para cargar oxígeno cada vez que nos haga falta.
Imaginate que...un buen día... alguien pregunte: ¿Y Omar? ¿Hace mucho que no lo veo?
y vos respondas: ¿No te enteraste? Murió, le cortaron el suministro.